Receta de molletes mexicanos

Los molletes mexicanos se pueden preparar de mil maneras, pero de base, consisten en una receta muy simple: bolillos cortados a la mitad, horneados con una pasta de frijoles refritos y con queso.

Una vez preparada la base para nuestros molletes, podemos ponernos creativos y aderezarlos con una infinidad de ingredientes: pico de gallo, hongos, jamón, chorizo, chiles, carne asada y un largo etcétera.

Hoy vamos a comenzar explicando la receta de base para hacer los molletes, y luego, pensaremos en algunas combinaciones e ideas para acompañarlos.

Toma en cuenta que necesitarás preparar previamente unos frijoles refritos para utilizarlos en esta receta. También, toma en cuenta que necesitarás un horno para gratinar los molletes.

5 de 1 voto

Molletes mexicanos receta

• 8 min
• Fácil
• 
  290
  Kcal
  

Receta de cocina fácil para preparar los molletes mexicanos clásicos, con frijoles y con queso.

Plato pan, bollería, harinas

Cocina Mexicana

Keyword receta facil, Receta tradicional

Tiempo de preparación 5 minutos minutos

Tiempo de cocción 3 minutos minutos

Tiempo total 8 minutos minutos

Raciones 2

Calorías 290kcal

Autor Lola

Ingredientes

• 1 pieza de bolillo o pan salado equivalente fresco.
• 80 gr de queso para fundir rebanado, troceado o rallado.

Elaboración paso a paso

• Para comenzar, sacaremos la rejilla o bandeja del horno, y lo precalentaremos. Haremos esto porque en poco tiempo, regresaremos con los molletes para gratinarlos. Utilizaremos una temperatura de 200 grados. Si cuentan con horno eléctrico en casa, pueden usarlo. Así no tendrán necesidad de encender el horno tradicional, usualmente más grande.
• Los frijoles refritos que vamos a utilizar tienen que estar hechos una pasta. Es decir, que tendremos que asegurarnos de que estén lo suficientemente aplastados. Si ese no es el caso, hagamos un puré con los frijoles, para comenzar.
• Ahora, nos ocuparemos del pan. Con un buen cuchillo de sierra, cortaremos el bolillo a la mitad. Esto tiene que hacerse a lo largo (es decir, de punta a punta) y no a lo ancho.
• Cuando hayas obtenido las dos mitades alargadas, puedes retirar una parte de la miga de pan, si lo deseas (la mayoría de los cocineros lo hacen).
• Luego, hay que tomar una decisión importante: ¿Qué colocar primero, los frijoles o el queso? Si Para aprovechar mejor la fase de gratinado, es dejar la capa de queso hasta arriba, pero hay quienes lo hacen al revés. Si dejas los frijoles arriba, al morder el mollete te sorprenderá la capa de queso, casi fundido, escondida entre los granos y el pan.
• El punto es que habrá que cubrir generosamente la cara interior de cada mitad de pan, con una capa generosa de queso y otra de crema de frijoles.
• Enseguida, los molletes irán directamente al horno precalentado. Yo prefiero colocarlos sobre la rejilla del horno, para una cocción uniforme. Cuando se utiliza la bandeja o placa del horno, existe el riesgo de tostar la parte del pan que queda en contacto con esta superficie (naturalmente, me refiero a tostarlo de más).
• Si has preparado un par de molletes, en tres minutos ya debemos haber obtenido el efecto deseado. Para cantidades más grandes, es posible que tengas que esperar un poco más de tiempo.
• Saca los molletes y sirve inmediatamente con los aderezos de tu elección.

¿Con qué acompañar los molletes?

Ya hemos explicado cómo preparar los molletes clásicos, con queso y con frijoles.

Ahora, podemos agregar los ingredientes que queramos. Por ejemplo, en la foto están cubiertos con trocitos de queso fresco (sí, ¡más queso!) y con tiras de lechuga. Independientemente de los acompañamientos, siempre recomiendo servir los molletes con salsa roja o una salsa verde. De esta manera quedarán deliciosos, aunque los sirvas solamente con los frijoles y el queso, sin agregar más nada.

También puedes acompañarlos con guacamole.

Otras ideas para servir los molletes:

• Con pico de gallo: Estos son los más comunes y también los más coloridos. Para preparar el pico de gallo, pica jitomates y cebollas en cubos muy pequeños, y también pica un poco de cilantro, muy finamente. Mezcla todo y adereza con sal, pimienta y limón. Opcionalmente, también pica un poco de chile jalapeño o chile serrano, e intégralo a la mezcla. Baña los molletes con un poco de pico de gallo, después de sacarlos del horno.
• Con chorizo: Calcula unos 50 gramos de chorizo por cada mollete. Pícalo en trocitos o en ruedas, y fríelo. Escurre la grasa y agrégalo a los molletes. Puede ser en una capa adicional, antes de hornearlos, o en al final, cuando hayan salido del horno. El chorizo puede ser de puerco o de pavo. También puedes usar chorizo verde.
• Con champiñones: Calcula tres piezas de champiñones por cada par de molletes. Lávalos bien y córtalos en láminas o trocitos. Puedes cocinarlos rápidamente en un sartén, y si lo deseas, combinarlos con un poquito de cebolla y ajo picados menudamente, y previamente fritos. Cuando coloques las capas de frijoles y queso a los molletes, haz también una capa de champiñones. Listo, envía todo al horno.

¿Qué hacer con el pan que sobra?

Si quitas una parte de las migas del pan cortado para hacer los molletes, no la tires. Puedes aprovecharla para otras preparaciones, como unas migas españolas, usarla para darle más cuerpo a una sopa o salsa, o guardarla para que se endurezca y hacer una reserva para preparar pudín de pan, o hacer pan perdido. También puedes simplemente guardar estos trozos de miga y usarlos para limpiar los restos del recipiente u olla con la pasta de frijoles refritos. Por supuesto, vamos a “limpiar” y comer. Siempre encontraremos una buena excusa 😉