Receta de muslos de pollo con salsa de soja y jengibre
No dejes de probar estos increíbles muslos de pollo con salsa de soja y jengibre, llenos de sabor y perfectos para un rico almuerzo
- 47 min
- 2 personas
- Fácil
- 420 Kcal
![Muslos de pollo con salsa de soja y jengibre](https://comedera.com/wp-content/uploads/sites/9/2025/02/Muslos-de-pollo-con-salsa-de-soja-y-jengibre.jpg?resize=360,202&quality=80)
Crédito: Shutterstock
Prepara estos deliciosos muslos de pollo con salsa de soja y jengibre, un platillo con un toque asiático que sorprenderá a tu paladar. Todos los detalles los tienes en Comedera.
El pollo es una de las proteínas más versátiles y queridas en la cocina, ya que se adapta a cualquier preparación y combina perfectamente con distintos sabores. Esta receta con jengibre y salsa de soja te llevará a un nuevo nivel de sabor.
Para preparar estos muslos de pollo necesitarás sal, pimienta, aceite de oliva, dientes de ajo, miel de abeja, salsa de soja y jengibre fresco. El resultado es un plato con un contraste perfecto entre lo dulce y lo salado.
Acompáñalos con tus guarniciones favoritas y disfruta de una comida completa y deliciosa. Sin más, ¡Iniciamos!
![Muslos de pollo con salsa de soja y jengibre](https://comedera.com/wp-content/uploads/sites/9/2025/02/Muslos-de-pollo-con-salsa-de-soja-y-jengibre.jpg?resize=150,150&quality=80)
Muslos de pollo con salsa de soja y jengibre
- 47 min
-
2
personas
- Fácil
-
420
Kcal
Ingredientes
- 2 muslos de pollo
- 2 dientes de ajo
- 4 cdas de salsa de soja
- 1 cda de miel
- 1 cdita de jengibre fresco rallado
- Sal al gusto
- Pimienta al gusto
- Aceite de oliva al gusto
Elaboración paso a paso
-
Precalienta una sartén con un poco de aceite de oliva.
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Retira la piel de los muslos, hazle unos cortes y sazona con sal y pimienta al gusto.
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Asa los muslos de pollo en la sartén por 10 minutos de cada lado aproximadamente hasta que queden dorados y medio cocidos.
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Mientras se cocinan, en un bol incorpora la salsa de soja, la miel y la ralladura de jengibre fresco. Mezcla muy bien.
-
Retira los muslos del sartén e incorpora un poco más de aceite de oliva.
-
Sofríe los dientes de ajo por un par de minutos luego vierte la salsa que preparaste. Mezcla y cocina por un minuto más.
-
Incorpora los muslos de pollo asados y baña con la salsa. Baja el fuego a la mitad y cocina tapado por 10 minutos más hasta que el pollo quede caramelizado y completamente cocido.
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Una vez listo, sirve con tus guarniciones favoritas.
Consejos para estos ricos muslos de pollo con salsa de soja y jengibre
- Ajusta la cantidad de salsa de soja según tu preferencia. Si deseas un sabor más intenso, añade más, pero con precaución para no exceder el nivel de sal.
- El jengibre fresco es ideal porque aporta un sabor más auténtico y delicado. Si no lo tienes, puedes usar jengibre en polvo, pero mide bien la cantidad para no sobrecargar el plato.
- La miel de abeja suaviza la salsa y crea un contraste delicioso con el jengibre y la salsa de soja. También puedes usar miel de agave o azúcar moreno.
- Experimenta añadiendo orégano o hierbas provenzales para intensificar los sabores y darle un toque aromático adicional.
- Una forma alternativa de preparar esta receta es marinar el pollo con los ingredientes y luego hornearlo hasta que esté bien cocido y caramelizado.
- El arroz blanco es el acompañante perfecto para este platillo, ya que absorbe la salsa y potencia su sabor.
- Si prefieres, puedes hacer esta receta con otras partes del pollo, como pechugas o alitas.
Más opciones de platillos con salsa de soja y jengibre
La salsa de soja y el jengibre son dos ingredientes esenciales en la cocina asiática, y su versatilidad los hace infaltables en cualquier despensa. Aquí te dejo algunas opciones adicionales que puedes preparar en casa. Estas brochetas de carne de res con setas y salsa de soja son perfectas para compartir en reuniones o comidas informales.
El mero al vapor con jengibre y cebollino es otra alternativa fácil y deliciosa para un almuerzo ligero. No olvides probar este aderezo de jengibre y salsa de soja, ideal para realzar el sabor de cualquier ensalada o platillo.