Salsa para hamburguesas, receta casera
Prepara en casa esta receta rápida de salsa para hamburguesas, fácil y económica
- 15 min
- Fácil
- 450 Kcal
Hoy vamos a explicar nuestra receta de salsa para hamburguesas, porque detrás de las mejores hamburguesas siempre hay una receta de salsa deliciosa.
Esta salsa está pensada para ponerla dentro de las hamburguesas, pero eso no quiere decir que eventualmente no puedas utilizarla para acompañar las patatas fritas, hot dogs u otros platos de comida rápida.
Con esta salsa burger, ya no tendrás que limitarte a la ketchup, la mayonesa y la mostaza para acompañar tus hamburguesas caseras. Todos te preguntarán cuál es tu secreto.
Receta casera de salsa para hamburguesas
- 15 min
- Fácil
-
450
Kcal
Prepara en casa esta receta rápida de salsa para hamburguesas, fácil y económica. Aprende la preparación de base para que después puedas adaptar la cantidad de ingredientes según tu gusto.
Raciones 10
Calorías 450kcal
Ingredientes
- 2 dientes de ajo
- 6 pepinillos pequeños en conserva de vinagre
- 8 cucharadas de mayonesa
- 4 cucharadas de salsa de tomate ketchup
- 2 cucharadas de mostaza de Dijon
- 1/4 cebolla blanca
- 1 cucharada de vinagre blanco
- 1 cucharadita de paprika
- 4 a 6 gotas de salsa inglesa
- 1/2 cucharada de azúcar mascabado
- Sal al gusto
- Pimienta molida al gusto
Elaboración paso a paso
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Comenzaremos por pelar los dientes de ajo. Luego hay que triturarlos con la ayuda de un triturador o de un mazo de cocina. Si no cuentas con alguno en casa, puedes utilizar un cuchillo bien afilado, para picar el ajo lo más finamente posible, o incluso pasarlo por un robot de cocina.
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También vamos a picar los pepinillos en cubitos lo más pequeños posibles. Opcionalmente, puedes incluso triturarlos para luego mezclarlos con el resto de los ingredientes.
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En el caso de la cebolla, la pelaremos y la picaremos lo más menudamente posible, con un cuchillo bien afilado o con la ayuda de un robot de cocina.
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Lo siguiente que hay que hacer será conseguir un recipiente o bol lo suficientemente grande como para mezclar todos los ingredientes. Ahí vamos a colocar la mostaza, la mayonesa y la ketchup. Agregaremos también el ajo, los pepinillos, la cebolla, una pizca de sal, otra de pimienta, de 4 a 6 gotas de salsa inglesa (según tu gusto), media cucharada de azúcar, el vinagre y la paprika.
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Hay que revolver todo hasta obtener una mezcla homogénea. De preferencia, lo ideal es utilizar un batidor eléctrico, para obtener una consistencia más cremosa.
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Una vez mezclados los ingredientes, hay que probar la salsa para corregir la sazón. Si hace falta, añade más sal o pimienta, para darle más sabor. Si quieres un toque más ácido, añade más pepinillos picados o un poquito más de vinagre. Para una salsa más dulce, aumenta la cantidad de azúcar. En cualquier caso, vuelve a mezclar bien la salsa.
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Eso es todo, tu salsa para hamburguesas casera ya está lista para servirse. Sin embargo, para darle más consistencia, puedes guardarla algunas horas en el refrigerador, o incluso durante toda una noche.
Consejos para preparar la salsa para hamburguesas casera
- Recomiendo el uso de azúcar mascabado en vez de azúcar blanca tradicional por su textura y su sabor acaramelado. En cualquier caso, puedes usar la que más te convenga.
- Los amantes de los sabores fuertes pueden darle un toque picante a la salsa, agregando algunas gotas de tabasco (por ejemplo) a la salsa para hamburguesas y mezclándolas con el resto de los ingredientes.
- En caso de que no cuentes con ajo y cebolla frescos en casa, puedes reemplazarlos por ajo en polvo y cebolla en polvo o deshidratadas. Sin embargo debes saber que no va a quedar igual.
- Si lo prefieres, en vez de pimienta negra, puedes reemplazar con pimienta blanca o verde (en polvo). Y sobre todo, si es posible, muele la pimienta justo antes de agregarla a la preparación, lo que le dará mucho más sabor a la salsa.
- Para una salsa más sabrosa, utiliza mayonesa casera para la base, preparada con nuestra receta de mayonesa.
Con qué usarla
Además del uso pensado original para esta salsa, puedes incluirla en otras comidas, por ejemplo:
- Para hot dogs
- Nuggets de pollo
- Patatas fritas, por supuesto
- Con alitas de pollo fritas o al horno
- Las puedes usar en filetes rusos
- Incluso puedes usarla en filetes de ternera hechas a la barbacoa