Receta de pechuga de pollo al vino blanco

Una receta de deliciosas pechugas de pollo deshuesadas cocinadas al horno con una poderosa salsa de vino blanco y champiñones salteados

  • 55 min
  • 360 Kcal
plato con pechugas de pollo al vino blanco

Foto: Shutterstock.

¿Estás buscando una receta de pollo fácil, elegante y deliciosa para impresionar a tus invitados o simplemente para disfrutar en una cena en casa? Las pechugas de pollo al vino blanco con champiñones son una opción perfecta para ti.

Esta receta ofrece una combinación de sabores clásicos y sofisticados en una salsa suave y cremosa. Además, es fácil de personalizar con tus ingredientes favoritos. El vino blanco agrega un sabor especial. Los champiñones salteados complementan perfectamente el sabor del pollo y la salsa, añadiendo una textura extra al plato.

Necesitarás caldo de pollo para hacer esta deliciosa receta. Tienes dos opciones, lo compras en el supermercado o usas nuestra receta de caldo de pollo.

Esta receta también es fácil de adaptar para una cena más ligera. Abajo te explicamos más.

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plato con pechugas de pollo al vino blanco

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Pechugas al vino blanco: receta fácil

  • 55 min

  • 360
    Kcal
Una receta de deliciosas pechugas de pollo deshuesadas cocinadas al horno con una poderosa salsa de vino blanco y champiñones salteados.

Plato Pollo
Cocina Casera
Keyword al horno
Tiempo de preparación 10 minutos
Tiempo de cocción 45 minutos
Tiempo total 55 minutos
Raciones 4
Calorías 360kcal
Autor Daniel

Ingredientes

  • 4 pechugas de pollo sin piel ni hueso
  • 1 cebolla picada en cubos
  • 2 dientes de ajo picados muy pequeño
  • 1 taza de vino blanco
  • 1 taza de caldo de pollo
  • 1/2 taza de crema de leche
  • 1 taza de champiñones cortados en rodajas
  • 2 cucharadas de mantequilla
  • Perejil fresco picado para decorar
  • 1 cucharada de aceite de oliva
  • Sal al gusto
  • Pimienta negra al gusto

Elaboración paso a paso

  • Precalienta el horno a 200°C.
  • Salpimenta las pechugas de pollo por ambos lados.
  • Calienta una sartén grande a fuego medio-alto y agrega el aceite de oliva.
  • Cuando el aceite esté caliente, agrega las pechugas de pollo y sella por unos 3-4 minutos por lado, hasta que estén doradas.
  • Retira del fuego y colocar en un recipiente apto para hornear.
  • En la misma sartén, agrega la cebolla y el ajo y cocina por unos 2-3 minutos hasta que estén dorados.
  • Agrega el vino blanco y el caldo de pollo y cocina a fuego medio-alto hasta que la mezcla comience a hervir. Reduce el fuego y cocina por unos 10-15 minutos hasta que la salsa haya reducido a la mitad.
  • Pon la crema de leche a la sartén y cocina por unos 2-3 minutos más, revolviendo constantemente hasta que la salsa se haya espesado ligeramente.
  • Ahora vas a agregar sal y pimienta al gusto.
  • Mientras tanto, en una sartén aparte, saltea los champiñones en la mantequilla hasta que estén dorados.
  • Vierte la salsa sobre las pechugas de pollo en el recipiente de hornear, y coloca los champiñones salteados por encima.
  • Hornea por unos 15-20 minutos, o hasta que las pechugas de pollo estén cocidas por completo.
  • Sirve las pechugas de pollo con la salsa y los champiñones por encima, espolvoreando con perejil fresco picado para decorar.

Algunos tips para esta receta de pechugas de pollo al vino

Si no te gusta el vino blanco, puedes usar vino tinto para hacer la salsa. También puedes usar cerveza.

Los champiñones tradicionales los puedes reemplazar por otra variedad de hongos, como por ejemplo portobello, shiitake, ostra, entre otros. Incluso puedes mezclar varios tipos.

Para agregar más sabor, tienes la opción de marinar las pechugas de pollo en un poco de jugo de limón, aceite de oliva, ajo y hierbas secas durante 30 minutos antes de cocinarlas. ¡Delicia!

Si estás haciendo dieta puedes preparar una versión más ligera de este plato reemplazando la crema de leche por leche evaporada o yogur griego desnatado.

Para una opción sin lactosa, usa leche de coco en lugar de la crema de leche.

Puedes servir este plato con una variedad de acompañamientos, por ejemplo arroz, pasta, puré de papas, alguna ensalada verde o verduras al vapor.

Si quieres agregar un poco de textura crujiente a la receta, puedes espolvorear un poco de pan rallado o nueces picadas por encima antes de hornear.

Si te sobró comida no hay problema, asegúrate de almacenar la salsa y las pechugas de pollo por separado en recipientes herméticos en la nevera. Luego calientas las sobras en el horno o en el microondas antes de servir, vuelves a juntar pollo y salsa y listo.

Un toque fresco a la receta: agrega un poco de jugo de limón recién exprimido y hojas de menta picadas a la salsa antes de servir.

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Comentarios
  1. Esta receta está súper fácil de seguir y es un platillo verdaderamente delicioso!! Muy fino y de cierta facilidad de preparar. Es importante comprar buenas y jugosas pechugas, yo las compré en COSTCO de las congeladas pre-sazonadasz. Todo un éxito en la cena con mis amigos. Gracias y Felicidades Daniel.

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