Receta de muslos de pollo con salsa de tamarindo y chile

Con esta receta, disfrutarás de un pollo frito crujiente con múltiples sabores salados, agrios y dulces, perfectos para cualquier ocasión

35 min
4 personas
Fácil
380 Kcal

Nos encantan las recetas con pollo y por eso te enseñaremos a preparar unos deliciosos muslos de pollo con salsa de tamarindo y chile, una receta dulce, ácida y picante que te encantará.

En esta receta el pollo puede preparar de diferentes maneras, ya que el atractivo es la salsa de tamarindo y chile, sin embargo, para esta versión en específico lo haremos frito, ya que combina en textura perfecto con la salsa.

Este platillo tiene influencias de la cocina tailandesa y mexicana, por sus sabores tan marcados y es perfecto para cualquier comida familiar, cena especial o como parte de tu menú semanal, para un almuerzo o una cena diferente.

Sigue el paso a paso y ¡comencemos!

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Receta de muslos de pollo con salsa de tamarindo y chile

35 min
4
personas
Fácil
380
Kcal

Con esta receta, disfrutarás de un pollo frito crujiente con múltiples sabores salados, agrios y dulces, perfectos para cualquier ocasión.

Plato Pollo

Cocina Casera

Keyword receta facil

Tiempo de preparación 15

Tiempo de cocción 20

Tiempo total 35

Raciones personas

Calorías 380kcal

Autor Cristina Cedeño

Ingredientes

Para el pollo:

8 muslos de pollo (con piel para mayor crocancia)
1 taza de yogur natural o suero de leche (buttermilk)
1 cdita de ajo en polvo
1 cdita de cebolla en polvo
1 cdita de pimentón dulce o ahumado
1/2 cdita de cúrcuma (Opcional, para dar color)
1/2 cdita de pimienta negra
Sal al gusto
Aceite vegetal o de coco para freír

Para la salsa de tamarindo y chile:

1/2 taza de pulpa de tamarindo
2 cdas de miel o azúcar moreno
1 cda de salsa de soya
2 chiles secos (como chipotle o de árbol)
1 diente de ajo
1/4 taza de agua
1 cdita de jengibre rallado

Elaboración paso a paso

Mezcla el yogur natural con el ajo en polvo, cebolla en polvo, pimentón, cúrcuma, sal y pimienta.
Sumerge los muslos de pollo en la mezcla y deja marinar durante al menos 30 minutos, si es más tiempo mejor.
Una vez listo el marinado, calienta suficiente aceite en una sartén profunda o freidora a 180 °C.
Saca los muslos de la marinada, dejando una capa ligera de yogur adherida, y fríelos directamente en el aceite caliente durante 12-15 minutos, hasta que estén dorados y crujientes.
Coloca los muslos en una rejilla para eliminar el exceso de aceite.
En una sartén pequeña, calienta un poco de aceite y sofríe el ajo finamente picado, el jengibre y los chiles durante 2-3 minutos.
Agrega la pulpa de tamarindo, la miel o azúcar, la salsa de soya y el agua. Cocina a fuego medio hasta que la mezcla hierva y espese ligeramente.
Ajusta el sabor con más miel o salsa de soya según tu preferencia.
Sirve los muslos de pollo con la salsa de tamarindo y chile aparte para que cada comensal pueda bañar el pollo o usarla como dip.

Tips para hacer unos muslos de pollo con salsa de tamarindo y chile irresistibles

Añade una pizca de bicarbonato de sodio a la mezcla seca para un rebozado más ligero y crujiente.
Te recomiendo ajustar la cantidad y el tipo de chile según tu tolerancia al picante.
Espolvorea semillas de sésamo tostadas y cebolla verde picada sobre la salsa antes de servir, le dará un toque delicioso.
Marina los muslos de pollo con especias, ajo, limón o yogur natural por al menos 2 horas, o incluso toda la noche, para garantizar un sabor intenso y una carne jugosa.
Antes de freír, asegúrate de que los muslos estén a temperatura ambiente para que se cocinen de manera uniforme.
Si deseas un extra de crocancia, puedes espolvorear un poco de queso parmesano rallado antes de freír los muslos.
Coloca los muslos en una rejilla después de freírlos para que no pierdan su crocancia debido a la humedad del papel absorbente.
Si prefieres una salsa más densa, utiliza maicena disuelta en agua fría, pero agrégala poco a poco para evitar que quede demasiado espesa.
Puedes hornear los muslos en lugar de freírlos, si es el caso rocía un poco de aceite sobre los muslos antes de hornearlos para lograr una piel crujiente.
Usa diferentes tipos de chile, como chipotle, para un toque ahumado, o chiles frescos para un picante más vivo.

Guarniciones ideales

Puedes preparar un delicioso arroz como acompañamiento principal, te recomiendo un rico arroz jazmín, arroz a la jardinera o arroz con espárragos. Si quieres añadir un sabor diferente, haz un arroz con alcachofas y limón.

Si el arroz no es lo tuyo, puedes acompañar con unas papas rusticas o unas papas fritas trufadas.

Y para terminar el plato: una buena ensalada. Te recomiendo una ensalada de col, bien crujiente, pico de gallo con mango o una ensalada de pepino y nueces.