Muslos de pollo con salsa de durazno: una receta agridulce

Los muslos de pollo con salsa de durazno son una receta deliciosa que combina lo mejor de dos mundos: dulce y salado. Así que con nuestra receta aprenderás a prepararlo, muy sencillo y delicioso.

Esta preparación es ideal si buscas un toque diferente en tu comida y el toque frutal con las especias y el jugo del pollo crean un balance ideal.

Este platillo es fácil de hacer y es perfecto para cenas familiares, celebraciones especiales o simplemente un almuerzo diferente con un sabor único.

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Cómo hacer muslos de pollo con salsa de durazno

• 40 min
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  2
  personas
  
• Fácil
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  350
  Kcal
  

Aunque la combinación de pollo y frutas no es algo nuevo en la gastronomía, el uso de salsa de durazno le dará un toque especial al plato.

Plato Pollo

Cocina Casera

Keyword receta facil

Tiempo de preparación 15 minutos minutos

Tiempo de cocción 25 minutos minutos

Tiempo total 40 minutos minutos

Raciones 2 personas

Calorías 350kcal

Autor Cristina Cedeño

Ingredientes

• 4 muslos de pollo (con piel o sin piel, según preferencia)
• 2 duraznos maduros (frescos o en conserva)
• 1 cda de miel
• 1 cda de mostaza Dijon
• 1 diente de ajo picado
• 1 cda de vinagre de manzana
• 1/2 taza de caldo de pollo
• 1 cdita de romero fresco (Opcional)
• 1/2 cdita de sal
• 1/4 cdita de pimienta negra
• 2 cdas de aceite de oliva

Elaboración paso a paso

• Comienza sazonando los muslos de pollo con sal, pimienta y romero (si decides usarlo).
• Calienta una sartén grande a fuego medio-alto, añade el aceite de oliva y, cuando esté caliente, coloca los muslos de pollo con la piel hacia abajo. Cocina durante 6-8 minutos o hasta que la piel esté dorada y crujiente. Da vuelta el pollo y cocina otros 6-8 minutos hasta que esté completamente cocido. Retira el pollo y resérvalo.
• En la misma sartén, agrega el ajo picado y cocina por 1-2 minutos hasta que esté fragante. Añade los duraznos picados y cocina por 5 minutos, aplastándolos ligeramente para liberar sus jugos. Incorpora la miel, la mostaza, el vinagre de manzana y el caldo de pollo. Cocina a fuego medio durante 5-7 minutos hasta que la salsa espese y los sabores se integren.
• Coloca los muslos de pollo nuevamente en la sartén con la salsa, y cocina todo junto a fuego bajo por 5 minutos, permitiendo que el pollo absorba los sabores de la salsa.
• Sirve los muslos de pollo bañados con la salsa de durazno.

Consejos para esta receta

• Para un toque extra de sabor, puedes añadir una pizca de jengibre rallado a la salsa de durazno.
• Si prefieres una salsa más suave, puedes licuarla al final para obtener una textura más cremosa.
• Si utilizas duraznos en conserva, asegúrate de escurrir bien el líquido antes de usarlos. También opta por los que estén en almíbar ligero o en su propio jugo, ya que el almíbar espeso podría hacer que la salsa sea demasiado dulce.
• Puedes sustituir el romero por tomillo o incluso un adobo de hierbas provenzales para variar el perfil de sabor.
• Si la salsa queda muy líquida, mezcla una cucharadita de maicena con agua fría e incorpórala a la salsa mientras hierve suavemente.
• Cambia la textura de la salsa. Si la prefieres más sedosa, cuélala después de cocinarla o licúala o para una salsa rustica machaca ligeramente los duraznos con un tenedor y déjalos en trozos.
• Si decides usar pollo sin piel para reducir calorías, asegúrate de sellar bien los muslos en el sartén para que no pierdan jugosidad.
• Añade una cucharada de vino blanco seco o caldo de pollo extra para agregar profundidad. También puedes agregar una cucharada de mermelada de durazno o miel de agave para añadir más dulzor.

Guarniciones ideales para estos muslos de pollo en salsa de durazno

Prepara un arroz basmati bien aromático o un arroz pilaf, mis opciones favoritas.

Si deseas añadir más vegetales, un salteado de quinoa, berenjena y champiñones son una excelente opción, bien deliciosa.

Si no eliges el salteado, puedes preparar una ensalada de quinoa y aguacate, bien fresca que complementará los sabores.

Finalmente, un puré de boniato, tajadas venezolanas (plátano frito) o espárragos a la soja y al limón, son opciones ricas a considerar.

Más recetas con durazno

A mí me encanta añadir frutas a mis preparaciones, sean dulces o saladas y el durazno es muy particular.

Para el desayuno, te recomiendo preparar un bowl de avena y duraznos bien nutritivo para comenzar el día.

Como comida fuerte, una ensalada de duraznos con queso cabra es una mezcla imperdible.

Y si quieres merendar, haz estos duraznos asados o un crumble de duraznos, jugoso, cremoso y con pocos ingredientes.