Limpia y pica finamente la cebolla y el ajo. Ralla el queso Parmesano.
En una sartén grande y profunda, calienta el aceite de oliva a fuego medio. Agrega la cebolla y el ajo, y sofríe hasta que estén transparentes, unos 5 minutos.
Añade el arroz Arborio a la sartén y cocina durante 2-3 minutos, revolviendo constantemente para tostar ligeramente los granos.
Vierte el vino blanco y cocina hasta que se evapore casi por completo, removiendo continuamente.
Añade una taza de caldo caliente y cocina, removiendo con frecuencia, hasta que el arroz absorba el líquido. Repite este proceso, añadiendo una taza de caldo cada vez, hasta que el arroz esté cremoso y cocido al dente, aproximadamente 18-20 minutos.
Ralla la trufa fresca sobre el risotto. Incorpora el queso Parmesano y la mantequilla, y mezcla bien hasta que se derritan y se integren completamente. Sazona con sal y pimienta al gusto.
Sirve el risotto de trufa caliente, decorado con perejil fresco picado si lo deseas.