Retira la grasa que pueda tener el lomo de cerdo.
En un recipiente con tapa, agrega una cama de sal marina. Coloca en el centro el lomo y cubre con más sal.
Tapa y refrigera por 24 horas.
Pasado ese tiempo, saca el lomo del refrigerador y retira muy bien la sal.
Pela los dientes de ajo y añade a un mortero. Incorpora la pimienta, el orégano, la paprika y el aceite de oliva. Tritura hasta formar una pasta.
Con esta pasta, frota el lomo por todos los lados muy bien. Envuelve con papel film hasta que quede bien apretado y deja reposar en el refrigerador por 72 horas.
Pasado ese tiempo, retira el lomo y deja reposar.
Precalienta el horno a 200 °C. por 30 minutos
Apaga el horno, coloca el lomo en una bandeja y deja en el horno durante 1 hora para que se temple.
Saca del horno y rebana. ¡Disfruta!