Sazona las pechugas de pollo con el comino, el ajo en polvo, el pimentón, sal y pimienta. Calienta el aceite de oliva en una sartén grande a fuego medio. Cocina las pechugas de pollo durante unos 6-7 minutos por cada lado o hasta que estén doradas y cocidas por completo. Retira del fuego y deja reposar durante 5 minutos antes de cortarlas en tiras o desmenuzarlas.
Mientras se cocina el pollo, pela y deshuesa el aguacate. Coloca el aguacate, la crema agria, el aderezo ranch y el jugo de limón en un procesador de alimentos o licuadora. Mezcla hasta obtener una textura cremosa y suave. Reserva.
Coloca las tortillas sobre una superficie plana. Añade una porción de pollo en el centro de cada tortilla. Luego, añade una capa de la salsa de aguacate ranch, un poco de lechuga, queso cheddar, tomate, cebolla morada y cilantro fresco, si lo deseas.
Dobla los lados de la tortilla hacia el centro, luego enrolla firmemente desde un extremo hasta el otro para formar el burrito.
Puedes servir los burritos directamente o dorarlos en una sartén caliente durante 1-2 minutos por cada lado para darles una textura crujiente.
Si deseas puedes cortarlo por la mitad de forma diagonal, avistarás los ingredientes y será más apetitoso y fácil de comer.